A las 8 de la noche ya tienes sueño y a las 9:30-10 de la noche cuando por fin se deciden dormirse es que entonces te toca a ti hacer todo lo que no has podido hacer por estar para arriba y para abajo detrás de ellos.
Cada vez que cuido niños se me olvida lo difícil que es pero a la vez sumamente gratificante pues no hay nada que se compare con ver la sonrisa de un niño que sonríe gracias a ti. No hay nada como volver a la niñez por esos momentitos para hacer feliz a un niño. Definitivamente, cada vez aprendo más que no es nada fácil tener hijos y cada vez admiro más a todos aquellos que los tienen. No es nada fácil estar detrás de un niño todo el día pendiente hay que no se caiga, no se de un golpe y que este siempre entretenido, saludable, etc. Son dignos de admiración todos aquellos padres que lo hacen y más aún aquellos que les corresponde la tarea y son solteros. Pero admiro a los que hacen bien su trabajo, los que sí se preocupan a cada segundo por ellos y juegan con ellos y les dedican de su tiempo. Aquellos que dejan de ver televisión o de hacer cosas para ellos mismos para vestirse de princesas o de superheroes para complacer y darle una niñez inolvidable a sus hijos. Ahora, tampoco es malcriarlos, hay un balance para todo y no admiro a los padres que tienen hijos de 18 años y todavía estén practicamente verificando todos los días que los calzoncillos que se pone esten limpios (por decir un ejemplo). Hay que saber ser un buen padre y hacer cosas con tus hijos pero también enseñarlos y educarlos a hacer las cosas por ellos mismos cuando sea el momento indicado.
El hecho de que cuide niños de vez en cuando no me hace tener ni una pizca de experiencia para criar un hijo pues no es para nada lo mismo pero sí aprendo mucho observando y practicando por eso es que estoy más que segura que aún me falta mucho por aprender. Ser padre TIENE que ser una vocación para todo el que tome la DESICIÓN de serlo porque no es una posesión tener un niño es un estilo de vida. Para mí ser padre es entregar tu vida completa por unos veintipico de años para dar lo mejor de tí para esas criaturas que necesitan a alguien que los guíe por la vida . Lo digo porque es lo que pude observar día a día en mi hogar, sobretodo con mi mamá quien practicamente dejo todo por criarnos. No es fácil y es un sacrificio. Siempre se debe pensar de esta manera y tal vez así tendríamos mejores generaciones en el futuro. Por último, debemos siempre recordar que si como padres, hicieron bien este trabajo no habrá nada más gratificante que al final del camino poder ver los frutos. Una sonrisa genuina en el rostro de un hijo que se siente satisfecho con el ser humano que es gracias a ti será lo único que se necesitará para comprender que todo el sacrificio valió la pena. Para mí, no hay nada más hermoso que poder ver una sonrisa en los niños que cuido. No me quiero imaginar cuando en algún futuro bien lejano pueda ver ESA sonrisa cargada de tantos sentimientos de gratitud en el rostro de algún hijo mío.
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